Hacienda recupera las cartas de aviso y pone el foco en más contribuyentes en 2022
La AEAT pondrá este año su punto de mira en los locales de coworking. «Ven fraude en cualquier cosa» denuncian los expertos.
El Plan de Control Tributario ya está en el Boletín Oficial del Estado (BOE). La teoría dice que este documento contiene las «directrices generales» de las actuaciones que pretende a llevar a cabo la Agencia Tributaria (AEAT) durante el ejercicio en cuestión. Eso sí, los detalles concretos del plan son «reservados», aseguran fuentes de la AEAT a este periódico.
Año tras año, buena parte del contenido de este texto se repite, aunque Hacienda suele incluir algunas novedades, como los tipos de contribuyentes en los que quiere poner el foco o el tipo de actuaciones con las que piensa dar caza a los supuestos defraudadores. «Porque el problema es que ellos ven fraude fiscal en cualquier cosa.
Los algoritmos, las estadísticas o las herramientas informáticas para que el contribuyente no se equivoque en sus obligaciones tributarias -como el asistente virtual de la renta- están muy bien, pero lo que no miran es qué pasa cuando se equivoca Hacienda y se lo hace pasar muy mal a un contribuyente que tiene razón», denuncia la presidenta de la Asociación Española de Asesores Fiscales (Aedaf), Stella Raventós, en declaraciones a Libre Mercado.
Haciendo una primera lectura del documento, Raventós insiste en que «está escrito con la falsa creencia de que una gran parte de la economía es fraudulenta y no dice nada del trato que reciben los contribuyentes por parte de la Agencia Tributaria». Para ahondar más en algunos de estos comportamientos a los que se refiere la experta es muy recomendable el serial «Hacienda, la Stasi de la España del siglo XXI» que publicó Luis Fernando Quintero el pasado año.
¿Dónde pondrá el foco Hacienda en 2022?
Entre las novedades más destacadas del plan de 2022 encontramos que Hacienda «retomará la emisión de cartas aviso a contribuyentes que, a lo largo del tiempo, presenten determinados parámetros que apunten a un riesgo potencial de incumplimiento».
Además, Hacienda pondrá este año la diana en los centros de coworking, unos locales donde diferentes empresarios comparten el espacio de trabajo, que serán visitados también por sus funcionarios. «Se continuará con el tradicional plan de visitas, con su doble componente de control y de fomento de la mejora del cumplimiento voluntario, destacando este año aquellas dedicadas a verificar cuestiones de carácter censal, entre las que se incluirán visitas a los denominados nidos de sociedades, como pueden encontrarse en centros de coworking y lugares de simple recepción de correspondencia», señala la Agencia Tributaria.
Este plan de visitas no es más que una pre inspección. «Es la antesala de una inspección donde todavía se permite regularizar y donde un agente tributario mira algunos puntos, como los libros de contabilidad o la numeración de las facturas. Si falta algo, ya es cuando se produce la inspección» explica el ex director general de la Agencia Tributaria, Ignacio Ruiz Jarabo.
Debido al coronavirus, estas nada agradables visitas de Hacienda a todo tipo de contribuyentes se redujeron en 2020 (último año con datos disponibles) hasta las 14.533, menos de la mitad de las 30.725 visitas que se produjeron en 2019, las 31.095 de 2018 o las 32.215 de 2017. En 2016, se registraron 24.491, según los datos facilitados por la AEAT.
Más hostigamiento al contribuyente
El hostigamiento de Hacienda a unos contribuyentes a los que hasta califica de insolidarios no acaba aquí. «Tras el refuerzo dado en la Ley Antifraude, se impulsarán de nuevo las personaciones en las sedes donde se realizan actividades económicas para combatir las conductas insolidarias de una parte muy reducida de contribuyentes que aprovechan la dificultad de contrastar datos sobre el volumen real de ingresos» avisan.
Además, seguirá cercando al dinero efectivo. «Continuarán las comprobaciones en aquellos sectores o modelos de negocio en los que se aprecien altos niveles de economía sumergida, y especialmente de ámbitos en los cuales se utiliza el efectivo como único medio de pago aceptado, o en los que se pueda utilizar por encima de la limitación legal de las transacciones en efectivo».
A su vez, pondrán el foco en más contribuyentes sospechosos de no declarar el IVA. «Se ampliará el colectivo de análisis de posibles contribuyentes no declarantes de IVA» amenazan. ¿Y qué colectivos son esos? cabe preguntarse. Pues según fuentes de la AEAT, «están trabajando en la definición de esos otros colectivos», aunque algunos de los sospechosos actuales son los «arrendadores» de viviendas o los que aparecen en las imputaciones procedentes del Suministro Inmediato de Información (SII), un sistema de cruzado de datos de la AEAT, que contrasta lo que declaran los proveedores y clientes de los contribuyentes para ver si coinciden.
¿Voluntariedad en el pago de impuestos?
Una de las palabras que más aparece en el nuevo Plan de Control Tributario es la voluntariedad del ciudadano en el pago de impuestos. «La Agencia Tributaria prevé desplegar a partir de 2022 una estrategia para extender en la organización el uso de técnicas de análisis del comportamiento del contribuyente al objeto de facilitar su cumplimiento voluntario» asegura Hacienda, que llega a prometer que lo que quiere es que sus nuevas reglas sean menos gravosas para el contribuyente.
«El planteamiento pasa por sistematizar la utilización de estas técnicas para la mejora del cumplimiento voluntario de las obligaciones fiscales desde la óptica de las comunicaciones con los contribuyentes y también de las aplicaciones informáticas de la Agencia. Se pretende así consolidar nuevas técnicas de trabajo, más eficientes y menos gravosas para el contribuyente, favoreciendo que sean sus propias decisiones voluntarias, adoptadas
con la debida información, las que determinen la mejora del cumplimiento fiscal» insisten y hasta habla de «la mejora espontánea del cumplimiento fiscal», otro concepto inventado. «Bajo el mismo enfoque de comprender mejor el comportamiento del contribuyente para, a continuación, fomentar la mejora espontánea del cumplimiento fiscal, la Agencia Tributaria avanzará en herramientas que ya viene utilizando a estos efectos» añaden.
Esta no es la primera vez que la Agencia Tributaria introduce elementos morales en el pago de impuestos. Como ya publicó Libre Mercado, el Plan Estratégico de la AEAT 2020- 2023 contempla la «creación de una conciencia fiscal» en los colegios donde están los «futuros contribuyentes».
Para Ruiz Jarabo, «lo de que Hacienda busque la voluntariedad es mentira, lo que buscan es recaudar más. Además, es que, si no hay sanciones, los inspectores perderían el bonus y habría una revuelta». El experto considera que el Plan de Control Tributario no es más que «marketing político y un documento que no sirve para nada porque no concreta y no ha servido para disminuir el fraude fiscal».
APTTA. Servicio de Información Actualizada (No vinculante)
Fuente: Libre Mercado.